El gluten es una proteína presente en alimentos que contienen trigo y sus variantes (sémola, kamut y espelta), cebada, centeno y avena, entre otros. Es el responsable de la esponjosidad y elasticidad de los alimentos como el pan o la bollería y contribuye a la unión del resto de los ingredientes y de las moléculas de agua que lo contienen.
Algunas personas tienen dificultad para tolerar el gluten ya que se trata de una proteína que debe ser digerida y descompuesta en fracciones pequeñas (péptidos). Estas personas acaban teniendo sensibilidad o daño en el intestino delgado.
No se debe confundir la intolerancia al gluten con la celiaquía, esta es una enfermedad genética autoinmune que presenta una intolerancia permanente al gluten. Por lo que hay personas con sensibilidad al gluten y, sin embargo, no son celíacas.
Los síntomas más comunes suelen ser dolor persistente en la zona abdominal, diarreas frecuentes, eccemas o erupciones en la piel, dolor de cabeza, fatiga, estreñimiento, náuseas y vómitos, anemia, hinchazón abdominal, delgadez o incluso crecimiento lento en niños.
En qué consiste EL TEST
Si sospechas de una posible intolerancia al gluten o incluso celiaquía, se puede detectar mediante analítica en sangre.
En la farmacia llevamos a cabo un test rápido en sangre capilar mediante un pinchazo en el dedo, que nos permite saber si existe intolerancia al gluten mediante la búsqueda de anticuerpos.
RESULTADOS
Los resultados se entregan en 10 minutos.
En el caso de que el resultado haya sido negativo es recomendable un tratamiento para mejorar los síntomas que manifiesta el paciente y unas pautas higiénico-dietéticas como:
- Evitar el consumo de antiinflamatorios.
- Evitar las comidas copiosas, abundantes y pesadas.
- Masticar bien y lentamente.
- Comer alimentos preparados adecuadamente.
- Evitar el alcohol y el tabaco.
- Evitar el estrés.
- Lavarse bien las manos después de usar el baño y antes de comer.
Así como descartar, mediante otras pruebas que no se trate de una posible intolerancia a ciertos alimentos o incluso, una posible infección por la bacteria Helicobacter Pylori.
En el caso que el resultado haya sido positivo, se confecciona un informe donde se confirma la intolerancia al gluten pero no confirma la celiaquía. Se aconseja realizar el test genético para descartar una posible enfermedad celíaca. Aconsejamos pautas higiénico-dietéticas como:
- Retirar todos los alimentos que contengan gluten.
- Llevar una dieta variada y equilibrada para evitar carencias nutricionales. Fomentando el consumo de alimentos naturales que no contengan gluten como cereales sin gluten, verduras y hortalizas, frutas, legumbres, leche y derivados, carne, pescado y huevos. Evitar el consumo de productos manufacturados.
- Para mantener un consumo de hidratos de carbono y calorías adecuado, sustituir el pan por arroz, maíz, patata y legumbres.
- Leer atentamente las etiquetas de los productos y rechazar aquellos que no puedan verificarse como libre de gluten por el fabricante.
- En la cocina hay que asegurarse que las superficies, utensilios y electrodomésticos estén libres de residuos de elaboraciones anteriores donde se hayan cocinado alimentos con gluten.
- Los utensilios de cocina deben ser no porosos y junto a otras herramientas, serán de uso exclusivo. Evitar los trapos de cocina, usando papel de un solo uso.
- Lavarse siempre las manos antes de comer y cocinar.
Los resultados de la prueba de intolerancia al gluten están avalados por laboratorios Hartmann, con una sensibilidad del 81,25%, especificidad del 94.10% y precisión de 90%.
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Precio: 28,95€
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